Reseña: Siempre nos quedará el verano (Verano #3), Jenny Han

Título: Siempre nos quedará el verano
Autora: Jenny Han
Editorial: Planeta
Trilogía: Verano #3
Páginas: 288
ISBN: 9788408112648





 



Sinopsis

Han pasado dos años desde que Conrad le dijo a Belly que se fuera con Jeremiah. Ella y Jeremiah han sido inseparables desde entonces, incluso asisten a la misma universidad - pero, su relación no ha sido precisamente el feliz para siempre que Belly había esperado que fuera. Y cuando Jeremiah comete el peor error que un chico puede hacer, Belly se ve obligada a cuestionar lo que ella pensaba era el verdadero amor. ¿Realmente tiene un futuro con Jeremiah? ¿Ha olvidado a Conrad? Es hora de que Belly decida de una vez por todas quién tendrá su corazón para siempre.

Opinión personal

He aquí con el final de la trilogía Verano. El final del segundo libro me había dejado con los pájaros volando, realmente. Comencé a imaginar y a sacar conclusiones de todo tipo sólo para entender de quiénes estaba hablando y qué clase de vestido blanco era el que llevaba Belly, casi me vuelvo loca, pero dije QUÉ ESTOY ESPERANDO. Así que acá viene Siempre nos quedará el verano...

Al comenzar a leerlo me sorprendió bastante, había pasado mucho tiempo y la relación que habían formado Jeremiah y Belly era muy fuerte...se supone ¿No, Jere...? Ambos iban a la misma Universidad, tenían sus amigos y habían madurado mucho. De hecho si te pones a pensar el cambio de Belly en el primer libro con el último te das cuenta que ya hablamos de una mujer. Jeremiah comete un ERROR en la relación, el cual Belly se entera, tras el que Jere le pide que se case con ella. Y la muy %#/&%$ acepta, lo cual no lo comprendo, al menos tan pronto de que se haya enterado...

Cuando leí esa escena ya dije acá algo no va bien y comencé a ser más reacia respecto al personaje de Belly. Me sorprendía mucho su forma de pensar hacia Jeremiah tras pasar los dos libros anteriores a los pies de Conrad.

La escritura de Jenny Han fue muy buena, como con los demás libros, fácil, sencilla y ágil para el lector. Algo que amé es que en esta oportunidad Conrad tuvo sus capítulos para ponernos su punto de vista, sus pensamientos actuales y pasados, lo que me ayudó mucho en reconciliarme con su personaje, entenderlo.

Odié con todo mi ser el horrible triángulo amoroso entre Conrad, Jeremiah y Belly, no sólo porque me gustaban mucho los tres, ni por la hermosa historia pasada que tienen todos juntos, sino porque después de todo, los personajes que sufrían y discutían eran hermanos, familia y se me hacía tan difícil imaginar un final en el que todos estén bien. Odié a Belly por hacerles eso.😣

Me gustó volver a leer escenas en las que estaban los cuatro juntos de nuevo en la casa de la playa, después de tanto drama esas escenas valían la pena. Como también volver a encontrarnos con los rastros que dejo Susannah y los viejos recuerdos que van armando el rompecabezas. Me gustaría que la escritora hubiese agregado el contenido de la carta que le dejó Susannah a Jeremiah y Conrad al final.

Finalmente creo que obtuvo un buen cierre, a mi parecer saber con quién se había quedado Belly en la última página del libro, cuando tuvo otras 287 fue excesivo, pero me agradó saber que los tres pudieron salir bien de la situación. Fue un libro que me gustó mucho, pero me hizo sufrir mucho más por los personajes. Susannah siempre vas a estar en mi corazón.😔

Algo que no entendí y me gustaría que me dijeran si me equivoco o leí mal, es que en el final del segundo libro, el último fragmento dice "dos años después" y luego en el último libro todo lo que sucede en él sí pasó dos años después, pero la escena relatada no pasó en ese momento, sino casi 4 años después...

La trilogía se compone de: El verano en el que me enamoré, No hay verano sin ti y Siempre nos quedará el verano.

Puntaje:

★★★★